Dicta un dicho del escritor italiano Carlo Dossi que el “máximo signo del final es el principio” y en Nueva Inglaterra lo están viviendo en carne propia. Con la salida de Tom Brady de los Patriots un nuevo comienzo se avecina para la franquicia y con ello el final de la dinastía más dominante en la historia de la NFL.
Los Patriots están por vivir su temporada más complicada en los últimos 20 años. Dejando a un lado la escandalosa salida de su legendario quarterback, Bill Belichick tiene grandes problemas sobre la mesa de cara a una campaña que en el papel pinta para ser la caída del gran imperio que construyó durante dos décadas a lado de Brady.
El conjunto de New England remará contracorriente en el 2020 al enfrentarse al calendario más difícil de toda la NFL. Basado en los resultados de la campaña anterior, los próximos oponentes de los Pats tienen un récord de 137 victorias por 118 descalabros y un empate. Al difícil calendario se le suman las partidas de hombres clave en cada sector del equipo, más allá de Brady.
Hombres clave tanto de la ofensiva como de la defensiva han partido, y Belichick tendrá que demostrar sus capacidades como entrenador en jefe saliendo adelante con el personal que tiene a la mano. Entre retiros y agencia libre, los Patriots se aproximan a una caótica campaña en la que parten como víctimas en una división que tiene dos décadas sin dar resultados óptimos.
Con la salida de Brady, los Patriots necesitarán de un impecable trabajo por parte de su defensiva, la cual fue la mejor de la liga en puntos recibidos en la temporada anterior (14.1). Sin embargo, con las salidas de Kyle Van Noy (Miami), Jamie Collins y Danny Shelton (Detroit) la situación se mira cuesta arriba para esta unidad, considerando que enfrentarán a mariscales de campo de la talla de Patrick Mahomes, Lamar Jackson, Russell Wilson y Deshaun Watson.
El 2020 es un año crucial para el legado de Belichick, quien de mantener la racha positiva en el Este de la Conferencia Americana lograría confirmar que la mente maestra detrás de la dinastía siempre ha sido y será él.
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