Los Tampa Bay Buccaneers habían sido eliminados en la Ronda Divisional por Los Angeles Rams en la pasada temporada de la NFL por 30-27.
Y con el anuncio, tiempo después del retiro de Tom Brady de los emparrillados, el balón del pase de anotación a Mike Evans en último cuarto faltando 3:20 minutos se había convertido en el último pase de anotación en la carrera del que para muchos es considerado el mejor jugador en la historia de la Liga.
Fue entonces que el ovoide fue subastado por Lelands y adquirido por 518 mil dólares; sin embargo, tras el anunció de Brady de su regreso a la NFL para la próxima temporada, las partes aceptaron anular la venta del balón.
"Deseábamos hacer lo correcto aquí", dijo Mike Heffner, presidente y socio en Lelands.
Pero a pesar de la caída en el precio del ovoide, Heffner dijo que múltiples compradores potenciales lo han contactado para adquirirlo.
"Sigue siendo una historia increíble", señaló Heffner. "Cualquier balón de touchdown de Brady lo es".