Con el anuncio del calendario de la NFL para la Temporada 2024, hubo aficionados que comenzaron a especular sobre la influencia de Taylor Swift en la designación de fechas de partidos. El romance de la cantante con el ala cerrada de los Kansas City Chiefs fue una de las novedades en 2023 y tuvo un impacto positivo en la liga.
El incremento de público femenino, así como el aumento de televidentes en la transmisión de los partidos de Kansas City, eventual campeón en el Super Bowl, fueron algunos de los efectos que tuvo la intérprete en la NFL. Sin embargo, no fue por esto que la liga la tomó a consideración para la elaboración del calendario.
En entrevista en el pódcast Up And Adams, la directora de transmisión de la NFL, Charlotte Carey, descartó las teorías que señalaban que, intencionalmente, se hizo la calendarización para que Taylor Swift pudiera ver a Travis. No obstante, reconoció que tuvo un impacto por los conciertos que tendrá en varios de los estadios de los equipos.
"Hay giras (musicales) y cosas así, como todos los años, y siempre se vuelve cada vez más difícil y suceden más cosas. Taylor regresará a Estados Unidos durante nuestra temporada de fútbol y también tiene un par de presentaciones ahí", continuó. "Al final del día, todavía necesitamos poder jugar al fútbol en todas las semanas en las que realmente necesitamos estar en casa y jugar al fútbol".
"Pero Taylor definitivamente también es un factor este año", finalizó. El Hard Rock Stadium, el Caesars Superdome y el Lucas Oil Stadium son los inmuebles que recibirán The Eras Tour entre octubre y noviembre, cuando la gira regrese a Estados Unidos.
Por otra parte, intencional o no, Taylor Swift podría ver casi todos los partidos de los Chiefs. El único encuentro que es un hecho que no podría estar es ante Los Angeles Chargers, el 8 de diciembre, fecha en la que la cantante concluirá su gira en Vancouver.
Mientras que los juegos ante los Buffalo Bills (17 de noviembre) y las Carolina Panthers (24 de noviembre) son un día después de conciertos programados en Toronto. La artista podría intentar volar de ida y vuelta a Canadá, algo que generó polémica a inicios de año cuando voló desde Japón para llegar al Super Bowl, por las emisiones de carbono que generan sus vuelos privados.