Los Lions permitieron que los Falcons anotasen un touchdown. Era lo que querían. Pero Atlanta encontró otra manera increíble de perder.
Matthew Stafford conectó con T.J. Hockenson para un pase de touchdown de 11 yardas al expirar el tiempo y Matt Prater consiguió el punto extra de 48 yardas para que Detroit derrotase el domingo 23-22 a Atlanta.
Los Lions (3-3) ganaron su segundo partido consecutivo — su primera racha de victorias desde inicios de la temporada de 2019.
Pero este fue un triunfo extraño.
Abajo 16-14, los Falcons (1-6) tenían a su alcance hacer agotar el reloj y ejecutar un gol de campo para el gol de campo cuando consiguieron el primer down en la 10 de los Lions y algo más de un minuto.
Detroit había empleado todas sus pausas en la ofensiva, por lo que ya no tenían forma de para el reloj. Al entender que su única oportunidad era permitiendo un rápido touchdown, los Lions no hicieron nada para detener a Todd Gurley tras recibir de Matt Ryan.
Gurley avanzó con libertad, dándose cuenta muy tarde de las intenciones de los Lions. Quiso tirarse pero acabó en la raya de gol con 1:04 por jugar.
Los Falcons materializaron la conversión de 2 puntos para irse arriba 22-16, pero los Lions tenían aún la posibilidad de remontar ante un equipo que ya se había convertido en el primero en la historia de la NFL en perder dos partidos seguidas tras ir al frente por al menos 15 puntos en el último cuarto.
Stafford avanzó 75 yardas en ocho jugadas para ponerse en la 11 de los Falcons. Con 2 segundos en el rojo, Stafford finalmente conectó con Hockenson.
Faltaba algo más de drama. Detroit fue penalizado por conducta antideportiva en la celebración, lo que les forzó a cobrar el punto extra desde las yarda 30, pero Prater logró convertirlo.
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