Dak Prescott lanzó dos pases de touchdown a Cole Beasley para inyectarle vida a una inerte ofensiva aérea de Dallas y además corrió para 82 yardas en la victoria de los Cowboys el domingo 40-7 sobre los Jaguars de Jacksonville.
Tal vez entusiasmados por su encuentro con el peleador de UFC Conor McGregor antes del encuentro, los Cowboys montaron ventaja de 24-0 al medio tiempo, gracias a los dos primeros touchdowns de la temporada de Beasley en la 30ma ofensiva aérea, que enfrentaba a la mejor defensiva contra el pase de la NFL.
Prescott acumuló 151 de sus 183 yardas por pase en la primera mitad debido a que Dallas no necesitó lanzar mucho el balón en la segunda parte gracias a la cómoda ventaja.
El Novato del Año de 2016 en la NFL ya había impuesto una marca personal de yardas por tierra cuando esquivó una captura para convertirla en una escapada de 28 yardas, su más larga en la NFL. Anotó el primer touchdown de Dallas en carrera de 17 yardas.
Por primera vez en los 9 años del AT&T Stadium los Cowboys ganaron sus primeros tres juegos como locales de la campaña. La mayoría de sus problemas ofensivos se manifestaron en sus tres derrotas como visitantes.
En esta ocasión no tuvieron tales dificultades. Beasley tuvo el segundo juego de su carrera con 100 yardas por recepción al finalizar con 101 en nueve atrapadas, incluyendo touchdowns de 17 y 9 yardas.
Abajo por 20 al medio tiempo por segunda semana en fila, los Jaguars (3-3) tuvieron que abandonar el juego terrestre. Por cuarto encuentro no contaron con el running back Leonard Fournete, debido a una lesión en el tendón de la corva, y su parchada línea ofensiva tuvo que recurrir a su tercer tacle izquierdo.
Blake Bortles, quien estableció marca personal en yardas aéreas en semanas consecutivas, tuvo la oportunidad de convertirse en el quinto quarterback en la historia con tres partidos en fila de al menos 475 yardas, pero completó apenas 15 de 26 para 149 yardas con dos pases de touchdown y una intercepción.