Amarga Navidad la que vivieron los Chiefs de Kansas City al caer derrotados 20-14 frente a unos Raiders que aún sueñan con la postemporada de la NFL. En esta ocasión, ni la presencia de Taylor Swift en el Arrowhead Stadium impidió este momento tan bochornoso.
La defensiva de Las Vegas le cerró los espacios a Patrick Mahomes, sin duda alguna, asaltaron a los Chiefs y les robaron la Navidad con Zamir White como jugador clave.
El primer cuarto fue inconsistente para los dos equipos, parecía que fue una larga noche de festejos, solamente un gol de campo de 24 yardas por los Raiders se hizo presente en el marcador.
Antes de que se doblara la camilla en la que lo revisaban los médicos por un fuerte golpe en los últimos minutos, Isiah Pacheco se escapó desde el Wildcat y puso el primer touchdown del encuentro.
Después de esa jugada, los Chiefs desaparecieron del estadio, pues los Raiders se robaron la Navidad y pintaron una tarde gris para todos los asistentes del Arrowhead Stadium.
Faltando 4 minutos con 55 segundos en el segundo cuarto, Mahomes no recibió el snap y le obsequió un regalo de Navidad de Bilal Nichols. Segundos después, Jack Jones leyó la mente de Patrick para el segundo TD consecutivo, con la conversión de dos puntos recuperaron el anterior que habían fallado.
Sin embargo, la jugada fue duramente criticada debido a que Jones fue a celebrar con los aficionados de los Chiefs y cuando parecía que le regalaría el ovoide a un joven fanático, se lo arrebató bruscamente. Para el tercer episodio solo hubo un gol de campo de 35 yardas que puso el 20-7.
Patrick Mahomes trató de salvar la Navidad de los de Kansas City con un arcoíris que dibujó en el aire para Justin Watson, no obstante, el intento fue en vano, pues el reloj se consumió y concluyó 20-14.