De La tragedia de Otelo, el moro de Venecia (1622) escrita por William Shakespeare a Deadpool de Fabian Nicieza, los antihéroes forman parte esencial de la cultura al ser la antítesis de lo socialmente deseable. Más allá de los personajes geniales como Tom Brady o Patrick Mahomes, en ocasiones un Super Bowl es definido por el acto de valentía de un protagonista inesperado. Es así que el próximo 7 de febrero, el campeón de la NFL bien podría ser decidido gracias a la intervención de un imprevisto.
Durante la última década, siete de los 10 ganadores del premio al Jugador Más Valioso del Super Bowl fueron quarterbacks, al ser la posición más determinante en este deporte y luego de alguna genialidad que les hizo merecer el galardón. Los otros tres fueron Malcolm Smith con los Seahawks, Von Miller con Broncos y Julian Edelman de los Patriots, todos ellos, héroes emergentes capaces de ser determinantes para el triunfo de sus equipos incluso por encima de las máximas figuras.
Pero no solo quienes son distinguidos con el MVP son necesariamente quienes cambian el rumbo de un juego a favor de su causa. Al tratarse de un deporte de conjunto, son muchas piezas las que pueden moverse en el tablero para inclinar la balanza hacia un costado, como la patada de Adam Vinatieri en los últimos segundos para darle la victoria a los Patriots en el Super Bowl XXXVIII ante Panthers, o la atrapada de Edelman en el Super Bowl LI ante Falcons.
Es así que nombres como el de Travis Kelce, Tyreek Hill, Clyde Edwards-Helaire o Darrel Williams podrían ser ese héroe no tradicional que guíe a Kansas City por segunda ocasión consecutiva a la gloria. Así como también podría ocurrir con hombres como Mike Evans, Ronald Jones II, Chris Godwin o Leonard Fournette del otro lado del balón para el equipo de Tampa Bay.
Todos ellos han demostrado el talento suficiente para convertirse en el arma letal ofensiva con la que se hiera de muerte a su rival para tener así el privilegio de acariciar el Trofeo Vince Lombardi. De hecho, Fournette es el corredor con más yardas en esta postemporada presente en el SBLV con 211, mientras que Hill es el de más yardas aéreas, seguido por Kelce y Godwin.
Aunque tampoco se puede descartar a la defensiva, que —como bien dicen— es un grupo que puede ganar campeonatos por sí solo. En ese sentido, Devin White es quien mejor podría estar perfilado para ser determinante al liderar los Playoffs con 26 tecleadas hasta ahora, mientras que Shaquil Barrett es líder en capturas de quarterback con 3.0 y Sean Murphy-Bunting es quien más intercepciones acumula con tres hasta el momento en la postemporada, por lo que no deben ser descartados del listado de eventuales héroes emergentes en el Super Bowl.
