Un día después de hacerle llegar al Papa Francisco, por parte del Arzobispo de Baltimore, un jersey personalizado con la firma del quarterback Lamar Jackson y del head coach John Harbaugh, los Ravens vencieron en el New Era Field a los Buffalo Bills por 24-17, para asegurar su boleto a la Postemporada.
Baltimore (11-2) posee el mejor récord de la Conferencia Americana y en caso de una caída de los Pittsburgh Steelers, también asegurarían el liderato de la División Norte; por su parte, Buffalo (9-4), a pesar de la derrota, aún depende de sí mismo para clasificar a los Playoffs e incluso, esperando derrotas de New England Patriots, poder pelear por la División Este.
En un juego dominado por las defensivas, el factor del quarterback fue la que determinó el destino del encuentro; en sus primeros dos ataques los de casa se fueron en tres y nada, mientras que los Cuervos fueron los primeros en marcar gracias a un gol de campo de de Justin Tucker de 36 yardas.
Antes del descasno, Lamar Jackson conectó el primero de sus tres tocuchdowns en el encuentro con Nick Boyle para ampliar la ventaja; los de Ochard Park sólo pudieron responder con dos goles de campo de Stephen Hauschka de 36 y 47 yardas respectivamente.
A pesar de ser limitado a sólo 145 yardas por aire y sufrir su primera intercepción desde la Semana 5 ante Pittsburgh, Lamar Jackson logró guiar a su equipo a la victoria con dos envíos más de anotación para Hayden Hurst y Willie Snead.
Josh Allen, que fue presionado durante todo el encuentro por la defensiva rival, sufiró para conseguir 146 yardas, y un pase de anotación para Cole Beasley con lo que acercó a su equipo, e incluso tuvo en la última jugada la opción de igualar el compromiso, pero un pase a las diagonales para John Brown, con 1:08 en el reloj, fue bien defendido por Marcus Peters para sellar el resultado final.
