FRANCISCO SÁNCHEZ | INDIANAPOLIS
Fue un domingo perfecto para jugar. El sol apareció en Indianápolis, lo que favoreció para ver el colorido de las calles que poco a poco se fueron inundando de aficionados de Patriotas y Gigantes, quienes se dirigían al Lucas Oil Stadium, donde tuvo lugar la edición XLVI del Super Bowl.
Los accesos al estadio se abrieron a las 14:00 horas, en un estadio que presentó el lleno para un juego que se espera emocionante y que será amenizado en el medio tiempo por la reina del Pop, Madonna, quien no pudo haber escogido un mejor sitio para presentar algo de su nuevo material discográfico.
Antes de ello, los aficionados disfrutaron del Game Day Plaza, que no fue otra cosa más que la NFL Experience, la cual, se abrió solamente para aquellos que contaban con un boleto. Ahí, fans de Patriotas y Gigantes intercambiaban saludos –los más diplomáticos–; sin embargo, estaban aquellos más radicales, quienes gritaban improperios contra el equipo rival.
Pero la mayoría se comportó y para darle un aire más amigable al encuentro, un grupo de música ‘gospel’ amenizó el trayecto hacia las puertas del Lucas Oil Stadium donde el hermano mayor de Eli Manning, Peyton, ha tenido momentos de gloria.
Incluso, Peyton, quien robó atención estuvo presente en más de un aficionado de los Potros de Indianapolis que se encontraban en el estadio. El jersey con el número ‘18’ se hizo presente de principio a final de una semana que fue de total encanto para la gente de una ciudad que, en verdad, demostró que ama el futbol americano, a pesar de ser una de las capitales mundiales del automovilismo.
El ambiente resultó más familiar, nada que ver con la noche previa al juego donde el centro de la ciudad era sede de diversas manifestaciones desinhibidas, provocadas, en su mayoría por los efectos de la cebada y el alcohol en sus diversas formas.
Asimismo, fueron pocos los que el sábado traían algún jersey diferente al de los equipos protagonistas. Fue una fiesta exclusiva para Gigantes y Patriotas; los primeros, los más animados, mientras que los segundos, con aficionados que dieron un toque ‘mexicano’ al partido, con sarapes con el logo y los colores de Nueva Inglaterra, así como sombrero charro.
