Una mañana gris vivieron los Packers en el US Bank Stadium. No sólo cayeron 23-10 frente a los Vikings, sino que además, perdieron a su QB y líder, Aaron Rodgers.
La estrella de los Packers tuvo una fractura de clavícula en la primera mitad, luego de que el Anthony Barr lo tackleara y podría perderse lo que resta de la temporada.
Minnesota aprovechó el momento anímico y se alzó con la victoria. Case Keenum comandó a su equipo y terminó con 239 yardas, además de un TD.
Por su parte, Brett Hundley y la ofensiva de Green Bay no la pasaron bien. El mariscal de campo acabó con 33 envíos, sólo 18 completados y 3 intercepciones.
Tras este resultado, tanto Green Bay como Vikings se quedan con marca de 4-2.