Tradicionalmente, la jornada posterior al último domingo de la campaña regular se conocía como 'Black Monday', puesto que deparaba una serie de despidos en los equipos que habían fracasado.
Horas después de una derrota por 28-12 contra los Acereros de Pittsburgh en su último partido de la campaña regular, el dueño de los Browns, Jimmy Haslam, destituyó al entrenador Mike Pettine y al gerente general Ray Farmer. Cleveland tuvo su segunda temporada seguida con más derrotas que triunfos.
Y apenas dos horas luego de que concluyó su partido vespertino, los 49ers de San Francisco despidieron al entrenador Jim Tomsula.
Los fracasos de Cleveland y las posteriores destituciones son casi una tradición en esta franquicia.
Pettine tuvo una foja de 10-22 en dos años. Perdió 18 de sus últimos 21 compromisos, tras comenzar la temporada de 2014 con una promisoria foja de 7-4.
La continuidad del entrenador estaba en duda desde hace meses. Era el séptimo entrenador no interino del equipo desde 1999.
En cuanto a los 49ers, su director general Jed York tomó una decisión inusitada para esta campaña. Ascendió a Tomsula, quien era entrenador de la línea defensiva.
El salto de dos escalones en el organigrama resultó demasiado para Tomsula. Tuvo una foja de 5-11 y los 49ers se quedaron fuera de los Playoffs por segunda campaña consecutiva.
Hace un año, San Francisco quedó con un récord de 8-8, en lo que fue la cuarta temporada del entrenador Jim Harbaugh, antes de que dejara el plantel por un "acuerdo mutuo" con la directiva, según informaron los 49ers.
San Francisco remontó para superar 19-16 en prórroga a San Luis, pero ni eso salvó a Tomsula.
