En los últimos ocho años, los Bengalíes de Cincinnati han conseguido su pase a Playoffs en seis ocasiones, lo que suena a una buena estadística a su favor, pero tienen un gran problema: tienen desde 1990 sin ganar un partido en Postemporada.
Para esta temporada, el equipo que dirige Marvin Lewis tendrá que dar ese paso extra, ya que la paciencia con el mismo entrenador en jefe podría acabarse, al no poder cristalizar buenas temporadas a la ‘hora buena’.
El mariscal de campo, Andy Dalton ha demostrado tener lo necesario para ser el líder del equipo y, con objetivos como A.J. Green, Brandon LaFell y Tyler Eifert, el trabajo luce un poco menos complicado, aunque no hay que perder de vista que la defensiva aún no ha logrado ser confiable