Francisco ‘Bandido’ Vargas salió del anonimato para demostrar su poderío con un sólido KO al japonés Takashi Miura, previo a la pelea del Canelo Álvarez frente a Miguel Cotto. Aquella victoria le valió para ser reconocido por muchos como la sorpresa del año.
Destronar al nipón, considerado el mejor libra por libra de los pesos Superpluma y nuevo ‘devorador de mexicanos’, lo han llevado a ser el rival a vencer de la división.
La dedicación por este deporte inició desde que estuvo frente al televisor y vio los Juegos Olímpicos de Sidney 2000, cuando apenas tenía 15 años. Desde entonces, reconoce que él quiso sentir esa misma emoción de representar a México.
“Sentí una gran emoción, todo el mundo estaba atento de lo que sucedía y los atletas estaban dando su máximo esfuerzo porque querían ser orgullo para sus respectivas naciones”, comentó el Bandido a RÉCORD.
El primer acercamiento llegó en 2004, cuando fue hasta el Preolímpico, pero en su duelo decisivo perdió por un punto y quedó fuera de la justa de Atenas 2004. Sin embargo, ese fue el parteaguas para seguir adelante con su carrera en el pugilismo.
“Perder no me desanimó, seguí esforzándome y compitiendo en busca de mi sueño y de representar a México. Mi trabajo me llevó por fin a Beijing 2008, aventura que nunca olvidaré. Es un momento que todo deportista quiere vivir”, recuerda con orgullo.
Para Vargas fue un sueño cumplido llegar a la justa deportiva más importante del planeta y representar con pasión a su país.
“Aprendí a alimentarme bien, a hacer sacrificios y no tener vicios. Lo más importante es la preparación y ser disciplinado”, precisó el actual monarca Superpluma del CMB, quien dejó el boxeo amateur para competir por títulos mundiales.