Saúl 'Canelo' Álvarez regresó a la senda del triunfo luego de vencer por nocaut técnico en el round 10 a Alfredo 'Perro' Angulo, quien aguantó metralla durante toda la contienda, aunque no se vio tan combativo como en otras peleas.
Tony Weeks decidió parar la pelea, luego de un upper conectado por el Canelo que hizo para atrás a su oponente, pues consideró que ya había recibido suficiente castigo, lo que provocó el enojo de Angulo y de un sector de los aficionados que no estuvieron de acuerdo con la decisión, incluso el mismo Saúl se mostró sorprendido por la decisión.
El Canelo dejó el round de estudio para mejor ocasión, pues desde que sonó la campana comenzó a tirar volados de derecha e izquierda que sacudieron la humanidad del Perro, quien lució sorprendido y sin respuesta, mostrando lentitud en sus ataques.
Fue un Alfredo Angulo desconocido, sin ese empuje que lo caracteriza ni la agresividad que ha mostrado en la mayoría de sus peleas, ante un rival que tal y como se esperaba, lució; incluso, se veía rápido de manos y con poder en la pegada, sabiendo aprovechar las facilidades que le brindó el rival.
Cada golpe tirado por el Perro, era contestado con tres de parte del Canelo, quien se dedicó a hacer su trabajo y mostró crecimiento en su boxeo a expensas de un rival que le exigió poco y nada a lo largo de cada round.
El castigo propinado por el tapatío era evidente, pues desde el quinto episodio presentó inflamación en ambos ojos, incluso al finalizar el sexto, fue visitado por el doctor de ring, quien fue a revisar si el de Mexicali podría seguir en la contienda.
Pasada la mitad de la pelea, el Canelo disminuyó el ritmo en su boxeo, dejó de tirar golpes dando oportunidad a su oponente de tirar combinaciones, aunque pocos golpes lograron conectarlo, pues eran muy anunciados por Angulo y Álvarez lograba quitárselos con cierta facilidad.
Fue hasta el octavo round cuando pudimos ver a ese Perro Angulo que enfrentó a Erislandy Lara hace unos meses, logró meter combinaciones al rostro que sacudieron al tapatío, quien tuvo respuesta para el arsenal de su oponente.
Álvarez entendió que no debía bajar la guardia ni el ritmo de la pelea, pues sabía que Angulo era un oponente que había mostrado pegada, por lo que en el noveno giro regresó a lo que había hecho en los albores de la batalla y conectó par de combinaciones que pusieron a bailar al ex olímpico.