A unos días de la segunda pelea ante el filipino Manny Pacquiao, Tim Bradley reconoció que las críticas que le 'llovieron' tras el triunfo en la primera batalla lo llevaron a pensar en el suicidio.
"¿Consideré el suicidio?, ¡Diablos!, sí. Estaba en mi cama sentado pensando en lo que la gente estaba diciendo y escribiendo sobre mí. Yo estaba pensando 'no sólo no quiero boxear más, ni siquiera quiero vivir más. Esto apesta, no vale la pena".
El estadounidense reiteró que él no tiene dudas de su triunfo en la primera batalla, pero en la revancha debe dejar muy clara su victoria sobre el filipino.
"Tengo que demostrar a todos que puedo vencer a Manny, aunque creo que gané la primera pelea " y agregó: Lo que sea que los jueces decidan, no fue mi culpa, ¿por qué me culpaba?, eso es lo que me estaba metiendo el mundo".
Tim explicó que con la ayuda de su esposa aprendió a reírse de las burlas e insultos que recibía por lo ocurrido y salió de la depresión.