El quinto de la serie entre los Rangers de Texas y los Azulejos de Toronto arrojó una intensa polémica que dará de qué hablar durante bastante tiempo a todos los aficionados de la Major League Baseball.
Durante la séptima alta, cuando la pizarra señalaba el 2-2 entre ambos conjuntos, una jugada sumamente accidentada dio la ventaja parcial a los Rangers.
Rusell Martin, catcher de los azulejos, intentó lanzar la bola hacia el montículo para devolverla al pitcher; sin embargo, su mano chocó con el bat de Sin Su Choo, y la esférica salió desviada hacia el cuadro; el corredor de tercera aprovechó y llegó al plato, pero el umpire decidió anular la jugada.
Desde el dugout del equipo estadounidense se protestó la jugada; fue entonces cuando se les concedió la carrera luego de una extensa revisión desde las oficinas centrales de la liga en la ciudad de Nueva York.
Inconforme con la decisión, la novena canadiense apeló y decidió continuar el juego bajo protesta; en dicho instante el 3-2 ya estaba dictaminado con la marcación de un error del receptor de Toronto.