El equipo de beisbol de los Diablos Rojos del México no saldrá del Distrito Federal. Así lo anunció el dueño del equipo, Alfredo Harp Helú, quien reveló que se construirá una nueva casa para los Escarlatas, pues no podrán jugar más en el Foro Sol, por la llegada de la Fórmula Uno el próximo año.
"En 2016 podremos estrenar nuestro nuevo estadio, ya está platicado con las autoridades del Distrito Federal y va a ser en la Magdalena Mixhuca, va a ser un lugar exclusivamente para jugar beisbol, vamos a tener la ventaja de que no habrá otros eventos en el inmueble", aseguró el dueño de los Diablos Rojos.
"Nuestra nueva casa va a empezar de cero, pero les aseguro que lo podremos terminar para el inicio del 2016. Vamos a hacer un estadio bueno que será la casa de los Diablos Rojos del México y vamos a promover mucho el beisbol", dijo el empresario mexicano.
El presidente de los Diablos admitió que no serán los dueños del inmueble, aunque espera llegar a un buen acuerdo que le permita a su escuadra jugar ahí por tiempo indefinido.
"El estadio nuevo no será propiedad de nosotros, pero va a ser una concesión bien establecida, por un largo plazo y eso ya lo estamos checando desde el punto de vista legal. Si entramos con una buena inversión seguramente nos podremos quedar muchos años ahí", señaló en conferencia de prensa desde San Diego.
Finalmente, el oaxaqueño también aseguró que para el próximo año la afición seguirá viendo a los Pingos en la capital, pues planea acondicionar un inmueble, cuyo nombre no reveló, para que sea utilizado como sede alterna.
"La sede alterna podría estar en la misma Ciudad de México. Diablos Rojos y mi fundación, Alfredo Harp Helú, vamos a rehabilitar y acondicionar mejor varios campos de beisbol en la Ciudad de México y uno de estos campos será nuestra sede alterna dentro del Distrito Federal para la temporada 2015", concluyó el también accionista de los Padres de San Diego.
Harp Helú aseguró que el nuevo estadio de los Diablos también podría tener pasto artificial, aunque dijo que todo depende de las garantías en el suministro de agua.
"Si las autoridades me dicen que habrá un buen suministro de agua, podremos meter pasto natural, porque de lo contrario tendríamos que contratar 40 pipas diarias para regar. El pasto artificial es una opción que vamos a evaluar", manifestó.