Kyrie Irving, quien había pedido salir de los Cavaliers de Cleveland, vio cumplido su deseo cuando se le cedió a los Celtics de Boston en un intercambio por el astro Isaiah Thomas, el alero Jae Crowder, el pívot Ante Zizic y una selección en la primera ronda del draft de 2018.
Irving realizó el disparo más importante en la historia deportiva de Cleveland, para ganar la final de la NBA en 2016. Fue el primer título de la ciudad en cualquiera de las ligas deportivas relevantes de Estados Unidos desde 1964.
Se une a un equipo que cayó ante los Cavs en la final de conferencia de la temporada anterior y que no ha podido imponerse en años recientes a LeBron James y compañía. Según distintas versiones, Irving quería salir de los Cavs pues estaba cansado de ser compañero de James. Ahora tendrá que enfrentarlo, precisamente en el primer partido de la campaña regular.
Desde que Irving hizo su inusitada petición al dueño de los Cavs, Dan Gilbert, los campeones defensores de la Conferencia del Este habían buscado un socio para un trueque. Encontraron la opción perfecta en los Celtics, que basarán ahora sus aspiraciones en el base Irving y en Gordon Hayward, quien se declaró agente libre y llegó recién a las filas de Boston
“Kyrie es uno de los mejores anotadores en la NBA”, destacó el presidente de los Celtics, Danny Ainge. “Lo ha demostrado en el escenario principal, la final de la NBA, y en los últimos tres años. Es campeón de la NBA, medallista olímpico de oro y cuatro veces participante en el Juego de Estrellas. Y pese a todo lo que ha logrado, pensamos que sus mejores años están por venir”.