De nueva cuenta la parrilla de la Fórmula Uno tendrá la presencia constante de dos pilotos mexicanos. Sergio Pérez y Esteban Gutiérrez volverán a estar en cada carrera peleando con los mejores pilotos del mundo.
Al igual que en 2013 y 2014, los dos pilotos representarán a nuestro país en la máxima categoría del automovilismo, aunque con realidades diferentes, ya que el año de pausa de Gutiérrez, en el que fue tercer volante de Ferrari, cambió mucho el panorama.
De entrada, Checo entra a su sexta temporada totalmente afianzado como conductor, viene de vivir su mejor temporada en la F1 y su principal objetivo es brillar para dar el salto, otra vez, a un equipo grande.
Tras su máxima cosecha de puntos en una temporada y una fantástica segunda mitad en 2015, el tapatío aspira alto y, con un monoplaza que en apariencia será más competitivo desde el inicio, buscará su primer triunfo en la máxima categoría.
Esteban afronta un nuevo reto tras los dos años de pesadilla en Sauber y recibe una nueva oportunidad, a la cual, si no logra sacarle provecho, podría ser su última.
Tras su paso por Ferrari, el regiomontano reafirmó su fama de un piloto con grandes conocimientos, pero es el momento de mostrarlo en la pista. Debe crecer junto con Haas y conseguir buenos resultados desde el principio de la temporada.
La principal referencia para ambos serán sus coequiperos. Pérez, por tercer año, competirá con el alemán Nico Hulkenberg, al que venció el año pasado, mientras que Guti tiene de aliado/rival al francés Romain Grosjean, piloto que ha crecido a pasos agigantados y sabrá cómo sacar el mejor rendimiento a un bólido nuevo.
Este fin de semana en Australia, ambos pilotos buscarán conseguir lo que no pudieron durante dos años: sumar puntos en el mismo Gran Premio. Es tiempo de correr al éxito.
