Era el verano del 2009 cuando dos jóvenes recién salidos del futbol americano colegial de los Estados Unidos firmaron con los Indianapolis Colts para continuar su carrera como profesionales. Pat McAfee y Thomas Pestock incluso compartieron habitación durante el ‘Training Camp’ y a 13 años de esa etapa les toca verse las caras en un cuadrilátero de la WWE.
Mientras McAfee logró establecerse en la NFL como uno de los mejores pateadores de despeje de toda la Liga, Pestock nunca tuvo la oportunidad de debutar en los emparrillados y buscó en la lucha libre un escaparate para su vida como atleta. En WWE cambió su nombre, bajó considerablemente de peso y se estableció como un elemento rentable para la compañía de la familia McMahon.
“No había ningún presagio de eso entonces”, dijo Pestock, quien ahora es conocido a nivel mundial como Happy Corbin. “Pat (McAfee) ha tenido éxito en todo lo que ha hecho. Esta es una antigua batalla del bien contra el mal. Pat intentará encontrar el éxito en SummerSlam y haré todo lo posible por detenerlo”.
Luego de ocho temporadas en la NFL, McAfee decidió involucrarse en los medios de comunicación con su programa que ha sido un éxito rotundo. A partir de ahí vio la posibilidad de cumplir el sueño de ser una superestrella de la WWE y gracias a su capacidad atlética lo ha podido conseguir. El expateador estará en el Nissan Stadium de Nashville para hacerle frente al que fuera su compañero de equipo y habitación en una de las historias a largo plazo que se escribieron sin siquiera pensarse.
Ante los ataques constantes de Corbin sobre McAfee — quien hoy trabaja como comentarista de Smackdown — el exjugador de la NFL fue tajante: “En SummerSlam no podrás atacarme por la espalda, no podrás esconderte en la esquina, no podrás usar tu dermatitis causada por el pañal como excusa. En Nashville estaremos tú y yo, uno a uno, un hombre contra un estúpido bebé calvo”, sentenció McAfee.
