A la víbora no se le ha terminado el veneno, 'Stone Cold' Steve Austin tendrá casi dos décadas sin haber peleado pero su largo trayecto en los encordados le brindan la oportunidad de vencer al que se le ponga enfrente tal y como ocurrió con Kevin Owens.
El canadiense no se cansó se humillar y hablar pestes de Texas, el estado natal de Austin y el hijo pródigo tenía que salir a defender a los suyos.
Antes, KO tuvo su show, invitó a salir a Stone Cold y este, sin titubear, salió causando tremenda ovación. Incluso bajó la rampa en su tradicional cuadrimoto. Su toque caracterizo.
Owens pidió su oportunidad para sostener un pleito con Austin 3:16. "Mi primer lucha fue aquí, mi última lucha será aquí", afirmó el miembro del Salón de la Fama.
Las acciones comenzaron y pese a que Stone Cold cuenta con 57 años de edad, la ausencia de actividad no causó mella.
Golpeó de la misma manera en que lo hacía en sus mejores años, pateó igual, sometió a Owens como lo hacía cada semana con tipos como The Rock, Triple H, Shawn Michaels, Razor Ramon y otros más. Al canadiense le salió cara la osadía.
Owens tuvo poco que presumir, le aplicó una paralizadora pero no fue suficiente para rendir a Austin, él por su parte con la primera, lo mandó a dormir, lo puso espaldas planas y llegó el conteo de tres.
Las luces se encendieron y apareció la lluvia de cervezas, Stone Cold Steve Austin suma una victoria más a su carrera. ¿La última? Solo él lo sabe pero quizá volver al ring en WrestleMania pudo despertar en él, el deseo se aparacer un par de veces más.