En un hecho histórico para el deporte y la comunidad LGBTQ+, Nikki Hiltz se convertirá en la primera persona transgénero no binaria en competir de manera individual en unos Juegos Olímpicos. Este logro se concretará cuando participe en la prueba de medio fondo en París 2024, marcando un avance significativo en la inclusión y visibilidad en el atletismo y el movimiento olímpico.
Nikki Hiltz, nacido en California, Estados Unidos, ha sido una figura destacada en el atletismo, especializándose en pruebas de medio fondo. Su carrera ha estado marcada por el éxito y la dedicación, pero también por un profundo viaje personal de autodescubrimiento.
En una publicación realizada en Instagram en 2021, Hiltz, mujer de nacimiento, se declaró abiertamente como persona transgénero y no binario. “Hola, soy Nikki y soy transgénero. Eso significa que no me identifico con el género que me asignaron al nacer. La palabra que uso actualmente para describir mi género es no binario, y la mejor forma en la que puedo explicar mi género es como fluido. A veces me despierto sintiéndome como una reina poderosa y otros días me despierto como si solo fuera un chico siendo un chico.
“Publicar esto es emocionante y aterrador, pero soy y siempre seré una firme creyente de que la vulnerabilidad y la visibilidad son esenciales para crear el cambio social y la aceptación”.
Ahora, Nikki se convertirá en la segunda deportista declarada abiertamente transgénero en participar en una justa veraniega luego de la actuación en Tokio de la halterófila neozelandesa Laurel Hubbard. Sin embargo, no existe ningún precedente de algún otro atleta identificado como no binaria que se presentara en unos Juegos Olímpicos.
La atleta estadounidense no solo está haciendo historia en el atletismo; está ayudando a moldear un futuro más inclusivo y comprensivo para todos. París 2024 será el escenario donde su talento y su valentía brillarán, recordándonos que el deporte tiene el poder de transformar vidas y sociedades.