A una semana de la ceremonia de Inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024, la atención se centra en el director del evento, quien ha denunciado amenazas de muerte relacionadas con la apertura olímpica.
La Fiscalía de París ha iniciado una investigación sobre las amenazas dirigidas a Thomas Jolly, el director artístico de la ceremonia.
Jolly presentó una denuncia el martes pasado por amenazas de muerte debido a su supuesto origen judío, que ha sido desmentido, y su orientación sexual. También denunció injurias públicas y difamación por los mismos motivos, según informó la Fiscalía en un comunicado.
La investigación está a cargo del Centro Nacional para la Lucha Contra el Odio en Línea. La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, expresó su "apoyo inquebrantable" a Jolly, afirmando que la capital francesa siempre estará del lado de los artistas, la creación y la libertad.
La denuncia de Jolly se produjo después de que una artista que participó en la ceremonia de inauguración presentara una demanda por amenazas recibidas a través de internet.
Según su abogada, Audrey Msellati, la artista ha sido amenazada de muerte, tortura y violación, y ha recibido numerosos insultos de carácter antisemita, homófobo, sexista y gordófobo. Butch, la artista en cuestión, presentó la demanda el lunes y tiene intención de actuar contra cualquier persona que intente intimidarla en el futuro.
La ceremonia de Inauguración ha sido criticada por algunos sectores, que interpretaron ciertos elementos como una burla de la última cena de Jesucristo. Estas críticas provinieron de la ultraderecha política y de la Conferencia Episcopal francesa.
Jolly aclaró que se trataba de "una gran fiesta pagana" con los dioses del Olimpo, donde el dios del vino, Dionisios, fue interpretado por el cantante Philippe Katerine con el cuerpo pintado de azul.