Emiliano Hernández terminó en un cuarto lugar envidiable para cualquier atleta de la élite mundial, se quedó a tan solo cuatro puntos del bronce en los Juegos Olímpicos de París 2024.
El mexicano dio sus primeras sensaciones tras una férrea competencia y demostró su lado humano: “Antes que nada tengo que pedirle una disculpa a México, a mi familia”.
Al mismo tiempo dejó ver las emociones encontradas tras un largo proceso olímpico y la frustración de ver tan cerca la presea olímpica y lejos a la vez: “No tengo palabras para describir la tristeza que siento”.
“Tres segundos que me alejan de la competencia de mi vida. Nunca lo dije a la gente, pero me imaginaba mucho en el podio y repetir lo que hizo mi hermano. El caballo no fue un mal caballo, fue culpa mía”, resaltó.
El abanderado de la delegación mexicana se quedó con el reconocimiento ante el inmenso esfuerzo en su disciplina con un merecedor Diploma Olímpico.
Hernández se registró en los libros de historia tras lograr el mejor registro de puntos en la fase de Tiro-Carrera del pentatlón moderno con 720 puntos.