Durante el encuentro amistoso entre Alemania y España, el balón que se utilizará en Rusia 2018 figuró en el terreno de juego del ESPRIT Arena, pero no causó buena impresión en los porteros de ambas escuadras.
El guardameta del conjunto germano, Marc- André ter Stegen y David de Gea, cancerbero de la Furia Roja, se quejaron del esférico señalando que carece de agarre y toma efectos extraños que complican sus trabajo en el arco.
Asimismo, Pepe Reyna, portero del Nápoles, platicó que el material con el que está hecho el balón dificulta que puedan quedarse con él tras un tiro peligroso.