Pablo Guede lamentó el hecho de que por un solo error Tijuana perdiera por la mínima diferencia ante Atlas. Jonathan Orozco le regaló un gol a Renato Ibarra.
El guardameta quiso salir jugando con uno de los defensas centrales, pero dio un mal pase, regaló el balón al rival y tuvo que sacar el balón del fondo de su portería.
“Regalamos un gol contra un equipo que sabe defenderse muy bien y si regalas un tanto, ponemos el juego donde ellos mejor juegan y te cuesta mucho. No estuvimos finos, no fuimos agresivos, ventaja en las contras”, mencionó.
Pablo Guede no quedó satisfecho con el trabajo arbitral, pues en más de una ocasión se le vio reclamar las decisiones que tomó Jorge Antonio Pérez Durán.
El entrenador de Tijuana no quiso meterse en problemas, prefirió no hablar sobre los silbantes y se fue molesto por la derrota ante Atlas.
“De ellos nunca me escucharán hablar. Es muy complicado pitar un partido. A veces me excedo con los reclamos, pero difícilmente hablaré de los árbitros públicamente”, finalizó.