La rivalidad entre Pumas y Tigres sí está dentro de la cancha, pero al margen de ella, los felinos de la UANL han causado dolores profundos en la afición del Pedregal, pues han comprado jugadores que en sus respectivos momentos eran emblemáticos para la afición auriazul.
El primer zarpazo de Tigres a Pumas fue en junio de 2016 se concretó la venta de Ismael Sosa después de haber estado cinco torneos con Pumas (Clau. 2014 a Clau. 2016), donde jugó una Final justamente ante Tigres (Ape. 2015) y una Copa Libertadores.
La venta del 'Chuco' fue sorpresiva, pues él entonces y recién llegado presidente Rodrigo Ares de Parga dijo primero que no saldría y posteriormente se fue vendido argumentando que su salida era "necesaria" para pagar la nómina. Aunque a la postre le fue mejor en Nuevo León, pues fue dos veces Campeón de Liga MX y tres Campeón de Campeones.
El segundo sinsabor a Pumas lo causó Tigres con la adquisición de Carlos González en diciembre de 2020, después de haber jugado cinco torneos en el Pedregal (Clau. 2018 a Guard1anes 2020) y ser el goleador auriazul; y tras 32 goles (en liga y Liguilla) y jugar la Final del Guard1anes 2020 se fue a Tigres y recién llegado viajó con el equipo a Qatar para participar en el Mundial de Clubes.
Y el último y más reciente herida para Pumas fue la compra de Juan Pablo Vigón en julio 2021 luego de estar cinco torneos (Ape. 2019 a Guard1anes 2021) en Universidad e incluso se fue siendo capitán del equipo y después de haber jugado la Final del Guard1anes 2020; sin embargo, en dos años con Tigres ya logró ser Campeón de Liga MX y Campeón de Campeones.
