Felipe Ramos Rizo aseguró que actualmente la Comisión de Arbitraje no coloca a los mejores silbantes del país para la Final, enfatizando en que los encargados de impartir justicia en ese tipo de partidos tienen compromisos con la comisión.
“La comisión, desde antes que empezara la Liguilla, ya tenía decidido que ellos dos (Fernando Hernández y Marco Antonio Ortíz) iban a arbitrar la Final. Los ponen en Cuartos y dicen: 'Mandamos a Guerrero y a César a que arbitren los partidos más complicados de la Liguilla', que eran los partidos de vuelta de Semifinales. Los arbitran bien, salen bien librados sin ningún problema, y los desaparecen. ¿Por qué? Por los compromisos que la comisión había creado desde antes, tanto con Fernando como con Marco. Entonces hoy, las Finales no las arbitran los mejores árbitros del país, ni los que arbitran mejor en la Liguilla”, señaló en entrevista con RÉCORD.
De igual manera, ante la determinación para que Marco Antonio Ortiz silbe la Final de Vuelta, aseguró que es un buen árbitro, sin embargo, consideró que la Comisión de Arbitraje lo sacó de su estilo, ya que está totalmente cambiado con una personalidad tibia.
“Marco es un buen árbitro. Desafortunadamente para él, la comisión lo sacó de su estilo, de su forma de arbitrar, y le ha creado una personalidad tibia. Ya no es aquel árbitro que no permitía protestas, ya no es aquel árbitro enérgico. Hoy está totalmente cambiado, y creo que eso puede dañar el arbitraje para el fin de semana. Ojalá y me equivoque, ojalá y haga un gran trabajo, que los asistentes participen bien, que el VAR esté atento, pero la verdad, a como fue el torneo, a como vi a Marco en el partido de Tigres-Monterrey, lo veo muy difícil”, concluyó.