En un mundo tan pasional como lo es el deporte, el futbol es una mezcla de festejos contenidos y gritos de gol. La Liga MX se sale de la tendencia y ofrece escasas emociones durante los 90 minutos.
En 73 de los 115 partidos del Apertura 2021 se han marcado dos o menos goles y en 42 se consiguieron más de dos, en 33 se consiguió máximo un gol, 34 juegos se definieron por una anotación. Juegos muy cerrados, llenos de especulación, de miedo a no perder y técnicos que no perdiendo mantienen la chamba.
Hasta el momento se han conseguido 244 goles, de los cuales 62 (25.4%) se marcaron en los últimos 15 minutos de juego. 40 tantos se marcaron en el tiempo agregado (14 primer tiempo y 26 en el segundo). La falta de emociones se suple con definiciones sobre la hora, partidos tediosos que se definen en el suspiro final.
De las últimas cuatro jornadas, en tres se ha tenido el promedio más bajo de goles en el torneo donde no se rebasa la media de 1.5 goles por partidos. La jornada 10 es la más pobre en cuanto a producción con 11 anotaciones, en la seis se marcaron 12, en la 12 se consiguieron 14 y en la 13 únicamente 13. Una tendencia de más a menos en lo que va de la actual competencia.
En cuanto a la generación ofensiva, muy ligada a la calidad del espectáculo, en el actual torneo se han generado 2461 tiros a gol, 1674 fueron desviado, 787 (32%) a portería, 81 (3%) disparos al poste y el 10% (244) han terminado en las redes.
Al compararlo con otros deportes o las tendencias mundiales nos confirma que se reciben pocas emociones por el boleto pagado para ver los partidos de la Liga MX.
En las grandes ligas esta temporada se promediaron nueve carreras en cada uno de los 2430 juegos de temporada regular, en la NFL el promedio está entre seis y ocho anotaciones por juego, en las ligas de futbol como la Premier de Inglaterra o la MLS de los Estados Unidos el promedio es de 2.6 goles por juego, en México es de 2.1, un 20% por debajo de la tendencia mundial.
El torneo regular sufre demasiados sacrificios al ampliar la zona de liguilla, 17 jornadas que sirven de acomodo para la “fiesta grande” pero al tener 12 lugares disponibles, con cinco victorias en el torneo te puede alcanzar para calificar. El futbol mexicano está sumergido en la medianía de equipos que no se preocupan por el producto que se entrega al aficionado que paga un boleo o paga un sistema de televisión para ver los juegos, jugadores que no sienten el compromiso de generar espectáculo, entrenadores que viven bajo la premisa de no perder “para que no me corran”.
Un problema que está creciendo semana a semana, la crisis del gol que estamos viviendo es consecuencia del bajo nivel de exigencia que tiene el torneo. No es una problemática aislada, es una tendencia que vivimos cada jornada y que la única solución es cambiar la forma de competir y de una real preocupación por el producto que se le entrega al consumidor final que es el aficionado que paga por ver la Liga MX.