Son varios los casos de futbolistas del balompié mexicano que se han visto envueltos en dificultades, e incluso, han sido detenidos por las autoridades, como sucedió este viernes con Dani Alves, de Pumas. Esto, por una acusación que se hizo hacia el brasileño por acoso sexual.
En 2012, el exarquero de Monterrey y Juguares de Chiapas, Omar Ortíz, fue detenido y encarcelado al comprobársele que participaba en una red de secuestradores. El 'Gato' acudía a fiestas de gente adinerada y luego los 'ponía' a los delincuentes.
Otro caso muy sonado fue el del exguardamete de La Máquina de Cruz Azul, Óscar Pérez. El 'Conejo' fue detenido luego de que le tocara la prueba en un alcoholímetro y se le detectara que excedía los límites permitidos para poder conducir.
En 2019, otro acontecimiento que sacudió al futbol mexicano fue el del atacante Joao Maleck, quien bajo los influjos del alcohol chocó a una pareja de recién casados, causándoles la muerte. Luego de algunos meses encarcelado, fue liberado y ahora hasta juega de nuevo en la Liga de Expansión.
Los exjugadores del Necaxa, Alejando Molina y Luis Gorocito, purgaron una condena de cuatro años luego de verse envueltos en una pelea en un bar de Aguascalientes, donde golpearon a una persona que perdió la vida.
De igual forma, elementos como Ramón Ramírez y Gonzalo Farfán, exseleccionados nacionales, vivieron tragos amargos al verse involucrados en accidentes viales donde personas perdieron la vida.
Por último, Jonathan Fabbro, exjugador de Lobos BUAP y Jaguares de Chiapas, fue condenado a 14 años de cárcel luego de ser declarado culpable por abuso sexual.
La víctima del exfutbolista de 37 años fue su sobrina que sufrió los abusos entre los seis y once años, por lo que tras las pruebas presentadas y las declaraciones de la menor fue castigado por la justicia argentina.
