El empate entre Necaxa y Pachuca no reflejó el mal momento que viven ambos equipos en el Guardianes 2021, pues los dos equipos lo dejaron todo en la cancha del Estadio Victoria, incluso excediendo las pasiones de un partido de mitad de torneo.
A lo largo de todo el partido, sobre todo en la segunda mitad, los ánimos se calentaron por duras entradas que se presentaban, tendiendo como resultado al final un par de amonestados por bando.
Sin embargo, el momento de tensión llegó al final del partido, cuando Unai Bilbao intentó reanudar rápido las acciones y Kevin Álvarez lo evitó punteándole el balón, siendo la gota que derramó el vaso.
Idekel Domínguez, Miguel Herrera, Maxi Salas y Felipe Pardo repartieron empujones, siendo los protagonistas de la bronca, aunque al final el silbante Fernando Guerrero decidió no expulsar a nadie.