Después del segundo gol de Cruz Azul en el Estadio Hidalgo ante Pachuca, ambas aficiones se calentaron y comenzó la bronca de grada a grada que finalizó con algunas personas separadas.
Todo empezó cuando la gente de la Máquina explotó en gritos de victoria y celebración por el segundo gol a favor de los Cementeros, marcado por Rodrigo Huescas, sin embargo, esto no fue bien recibido por los locales que de inmediato comenzaron a gritar.
Acto seguido, ambas tribunas iniciaron el intercambio de gestos obscenos, gritos, burlas y la gente de los Tuzos fue la primera en lanzar basura y cerveza, a lo que la de Cruz Azul respondió con lo mismo.
Los elementos de seguridad identificaron a los presuntos iniciadores del conflicto y, pese a que pusieron resistencia y alegaron no hacer nada, fueron retirados de la zona de gradas.
La situación duró varios minutos y el cierre del partido se vivió de forma tensa y con más personal de seguridad, así como la policía también implicada y al pendiente de cualquier otra situación que pudiera desatarse.
Minutos antes del final, y después de que los jugadores abandonaron el terreno de juego, más afición de Pachuca siguió con conductas agresivas contra el staff del seguri, por lo que fueron retirados con el apoyo de más personal.