Uriel Antuna se convirtió en el protagonista de la primera mitad entre Cruz Azul y Chivas marcando el gol que, momentáneamente le da el triunfo a los celestes.
La noche era especial para el Brujo, pues se enfrentaba a su exequipo, pero con la consigna de darlo todo por La Máquina en busca de un mejor lugar en la tabla general.
Como era de esperarse, la afición rojiblanca que se dio cita en el Estadio Azteca se metió con el extremo derecho, abucheándolo cada vez que tocaba la pelota y reobrando cada una de sus actuaciones.
Pero el seleccionado nacional no se intimidó y había sido uno de los elementos más peligrosos de Cruz Azul, hasta que en tiempo agregado entró al área y fusiló al Wacho Jiménez sin piedad.
El Azteca estalló y Antuna al fin concretó la ‘venganza’ en contra de su ex afición, pero la cereza del pastel llegó en el festejo, pues no dudó en celebrarlo frente a ellos besando el escudo de Cruz Azul.
