Nada para nadie. Cruz y Azul y Chivas quedaron a deber en un duelo de gigantes, firmando un gris empate bajo el marco de un Azteca que lució una entrada para el olvido .
Cruz Azul impuso condiciones desde los primeros minutos con largas posesiones, moviendo el balón de un lado a otro y atacando constantemente el área rojiblanca, lo que trajo consigo la primera anotación del partido, a penas a los 10 minutos .
Los celestes orquestaron a gran velocidad un contragolpe maestro, encabezado por Orbelín Pineda y finalizado de gran forma por Jonathan Rodríguez, que quedó mano a mano contra Raúl Gudiño .
Pero las cosas cambiaron, Cruz Azul bajó las revoluciones y prefirió contragolpear a un Rebaño desconcertado, que con el pasar de los minutos creció en confianza y se fue acercando a la portería de Jesús Corona .
Tal atrevimiento tuvo su recompensa, pues Miguel Ponce enmudeció el Azteca con un cobro magistral de tiro libre en el 41’ para mandar el descanso con la igualada.
Para el complemento los papeles se invirtieron, la localía obligó a Cruz Azul a ser protagonista y Chivas trató de intimidar en la contra, aunque ninguno fue capaz de marcar diferencia en el marcador .
Si bien es cierto que La Máquina se adueñó de la la mejores acciones, el equipo de Caixinha no fue capaz de sentenciar el partido.
Por su parte, la escuadra rojiblanca careció de oportunidades arriba para inquietar a Jesús Corona y se quedó con un empate que de poco le sirve en la clasificación general, aunque en el cociente siempre será importante
