El nombre de Alfredo Tena quedó grabado con letras de oro en la historia del Club América y haber logrado 26 goles oficiales en su posición como defensa siempre será sinónimo de orgullo y satisfacción, pero también una marca que quedó intacta durante varios lustros y apenas fue igualada por Bruno Valdez el pasado sábado en Torreón al cobrar un penalti que abrió la llave de la victoria. En sus palabras sólo hay admiración.
“Admiro mucho a Bruno, lo vi trabajar muy de cerca cuando yo estaba en Fuerzas Básicas del América y se encontraba en un momento excepcional; siempre que había un córner o una jugada de pelota parada me le quedaba viendo porque sabía que era un peligro importante para los contrarios. Me da mucho gusto que haga goles, sobre todo que signifiquen tres puntos como el juego del sábado que dieron confianza al equipo y estabilidad.
“Es un gran defensor que tiene la personalidad e identidad que nos gusta a los americanistas, trabajaba a fondo siempre y cuando iba a la Selección de Paraguay regresaba con muchas ganas. Le vino la lesión en la rodilla, pero parece que está saliendo y esperemos que tome el nivel que tuvo con Miguel (Herrera). Hizo goles muy importantes en momentos decisivos y ojalá siga marcando para bien del grupo”, señaló a RÉCORD el Capitán Furia.
Verse alcanzado en el récord no le genera ningún tipo de sentimiento adverso, y comparte algunas de las similitudes y diferencias que visualiza con el zaguero paraguayo mientras se mantuvo activo como profesional.
“Nos parecemos en que entrábamos y no nos importaba ‘atropellar’ a alguien, íbamos como catapultas para encontrar la pelota. Creo que él tiene mejor técnica de cabeceo que yo y un golpe muy preciso. Es más alto y tiene la suerte de que hoy hay cortinas y gente que hace espacios que dan la posibilidad de encarrerarse más y poder conectar con más fuerza.
“Antes no se practicaba tanto la pelota parada y a veces el que estaba más cerca del córner era el que centraba. En la actualidad todos los equipos trabajan mucho el balón detenido, lo hacen por horas y hay un especialista en los servicios o jugadores que no entran en contacto con el esférico y son señuelos que sirven para abrir espacios. Con tanta evolución el zaguero tiene más posibilidades de hacer goles y si cabeceas tan bien como lo hace Bruno es mejor”, indicó Tena.
