Los últimos finalistas del futbol mexicano son un contraste absoluto. La reciente victoria del América a Monterrey confirmó las realidades de ambos equipos, pues mientras las Águilas se consolidaron en lo más alto del campeonato, Rayados se hunde cada vez más en el sótano de la tabla.
“Por algo se dice que somos el equipo más grande y debemos demostrarlo cada partido”, declaró sin temor el líder de la zaga azulcrema, Bruno Valdez.
Cuando sus situaciones deberían de ser similares debido a que los dos tuvieron el mismo tiempo de descanso después de la Final de Año Nuevo, solamente las Águilas están demostrando que su grandeza no les permite relajarse ni confiarse, y sin pretextos se ubican en lo más alto del certamen, a pesar de todas las adversidades que han tenido que superar en lo que va del Clausura 2020.
Miguel Herrera se ha visto obligado a modificar su esquema y once titular en distintas ocasiones, ya que las lesiones han sido una constante en el Nido: Nicolás Castillo, Renato Ibarra, Nicolás Benedetti y el particular caso de Roger Martínez, borrado del equipo, no han sido impedimento para que el conjunto americanista destaque y respete el prestigio de sus colores.
Contrario al conjunto de La Pandilla, que sobre la marcha solamente ha sufrido la baja de Matías Kranevitter y en un partido también tuvo fuera al 'Cachorro' Montes. Si bien los de la Sultana del Norte sufrieron la salida de Rodolfo Pizarro, los de Coapa también tuvieron que desprenderse de Guido Rodríguez, quien había sido una pieza fundamental en los últimos torneos.
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El caso de los refuerzos fue otra adversidad para el América, considerando que varios de ellos reportaron tarde, unos por el Preolímpico Sudamericano(Federico Viñas y Sebastián Cáceres) y otras más por lo lento que fueron las negociaciones, mientras que Rayados pudo tener a Aké Loba y Kranevitter unos días después de haberlos anunciado como sus refuerzos.
