Perdió la etiqueta de líder en el club. Guillermo Ochoa, Capitán del América en los últimos años poco a poco fue perdiendo la confianza del americanismo y para el último semestre su jerarquía en la plantilla ya no era la misma.
No es un secreto que uno de los temas que más cuestionaron los aficionados de las Águilas era el poco liderazgo que mostraba en momentos importantes. Inclusive, para un sector importante de la afición el arquero era una figura que representaba tibieza.
Sin embargo, al interior de la plantilla los propios jugadores muchas veces esperaron más de su Capitán, no solo dentro de la cancha sino también con temas administrativos en donde esperaban diera la cara por el grupo, pero no sucedía debido a que al portero no le gustaban las confrontaciones de ningún tipo y con nadie.
Y es que el equipo se quedó con la figura que representó Agustín Marchesín, guardameta que en todo momento respaldó a sus compañeros. De hecho, con su salida a Europa hay quienes al interior del vestidor veían más como líderes a Bruno Valdez y a Henry Martín, quienes siempre mantuvieron ese respeto y jerarquía por Memo Ochoa.