Las transformaciones, improvisaciones y sobre todo la falta de continuidad seguirán en la defensiva del América. Por cuarto partido de manera consecutiva las Águilas tendrán que probar una línea defensiva diferente a la del último encuentro debido a las lesiones que han pegado muy fuerte en el nido, especialmente con jugadores defensivos.
Miguel Herrera tendrá que sortear su visita al líder general con una zaga que no tuvo tantos días para trabajar y que nunca antes habían jugado juntos, tal y como ocurrió en los tres últimos choques antes Chivas, Cruz Azul y Pumas, con quienes juega los llamados ‘Clásicos’.
Lo destacado es que en todos estos compromisos, América logró salir invicto a pesar de que los rivales pedían máxima exigencia y ni la inactividad de algunos defensas o la juventud de otros terminaron siendo factor.
Uno de los elementos que logró encontrar cierta regularidad en una posición que no es su natural fue Santiago Cáseres, quien como medio de contención sus oportunidades han sido escasas, pero ante la ausencia de todos los centrales, respondió y cumplió mejor de lo que esperaban.
“Muy pocas veces en su carrera ha jugado como defensa central, nosotros lo estuvimos trabajando y nos da muy buena salida, es un tipo que marca muy bien y a pesar de no ser un tipo que mida 1.90 va muy bien por arriba. Nos ha gustado mucho lo que ha hecho en esa posición y afortunadamente nos ha sacado el trabajo y la chamba en esa zona por nuestras ausencias por lesiones”, confirmó Miguel Herrera hace un par de días.