La polémica apareció en el Estadio Azteca y el protagonista nuevamente fue el arbitraje. Roger Martínez desperdició la jugada más clara del partido desde el manchón penal al resbalar al momento de hacer contacto con la pelota.
En septiembre del 2020 sucedió una situación similar en el partido entre Mazatlán y Cruz Azul, donde Jonathan Rodríguez impactó, accidentalmente, dos veces el esférico; sin embargo, la jugada fue validada y contó la anotación.
Días después, Arturo Brizio, presidente de la Comisión de Arbitraje, respaldó la decisión porque la pelota supuestamente no se había puesto en juego.
“Para que ese segundo toque sea ilegal, se requiere que el balón sea puesto en juego.
“En el momento que se golpee y se desplace con claridad. En este caso, el balón nunca estuvo en juego porque no se movió”, declaró el exsilbante.
Sin embargo, para las Águilas la historia fue distinta y Diego Montaño, silbante del partido, decidió invalidar el gol y marcar fuera de lugar debido a que él solo se habilitó al hacer el segundo contacto con el esférico.
La incredulidad en el seno americanista era notable, la molestia de algunos jugadores en la cancha también fue evidente, no obstante, el árbitro señaló apegándose al reglamento que sustenta su decisión.