“Creo que nos usábamos los dos mutuamente porque cuando el técnico no puede salir a decir algo se lo dicen al de confianza”, las palabras de Gibrán Araige respecto a su estrecha relación con el exentrenador de la Selección Mexicana, Gerardo Martino.
Si alguien de la prensa nacional fue cercano al Tata es Gibrán Araige, el responsable de cubrir todos los detalles del Tri para TUDN y quien contó en entrevista cómo y dónde nació el vínculo con el estratega.
“El Tata era un técnico muy accesible, de repente la gente y el aficionado que no tiene esa cercanía con los técnicos puede imaginar ciertas cosas, pero nosotros como reporteros nos encontramos al técnico como persona. Yo recuerdo que mi primer trato con el Tata fue cuando saqué la nota de que él iba a ser el técnico de la Selección Mexicana, me voy a Atlanta, él todavía siendo el técnico del Atlanta United y ahí lo conozco”, recordó en entrevista con RÉCORD.
“Mi primer punto a favor es que él vivía en Estados Unidos y si veía a la Selección Mexicana la veía por Univisión y ahí estaba yo, entonces el día que yo llegué a Atlanta él sabía quién era yo, en cuanto me presento y le digo: 'Profe Martino, cómo está' y me dijo que ya sabía quién era”.
“Le pregunté si tenía familiares en México y me respondió que su bisabuelita y le dio risa y creo que desde ahí nos entendimos, nos conocimos y yo corrí con la gran suerte de que él veía los partidos por Univisión y para él yo era el reportero de la Selección”, relató.
Sin embargo, el propio periodista reconoció que pertenecer a uno de los medios con derechos benefició en su lazo, al punto en que su relación fue levada más allá de temas profesionales.
“Como se sabe los medios con derechos tienen un acceso muchísimo más importante y eso siempre lo he aceptado, no se trata de nombre del reportero, se trata de Televisa y TV Azteca que son los dueños de los derechos de la Selección y eso te ayuda a que tengas esa cercanía con el técnico y creo que es ahí donde yo termino haciendo una buena relación”.
“Después ya empezamos a tomar un café al finalizar las entrevistas, posteriormente llegamos a cenar aquí en la Ciudad de México, aproveché yo de alguna manera que el Tata venía de afuera, entonces no es tan social y tuve esa ventaja de poder hacer una amistad con él y él fue muy accesible, pero yo recuerdo que varios reporteros le escribieron al WhatsApp y el Tata siempre les respondía”, afirmó Gibrán Araige.