NANCY DE LA PEÑA
El 2011 es un año muy especial para Miguel Calero, pues luego de más de veinte años de carrera, once en las filas del Club Pachuca, decidió retirarse del balompié. El último partido del ahora ex guardameta fue el 22 de octubre en el Estadio Hidalgo, ante los Pumas de la UNAM.
Sin duda, el colombiano naturalizado mexicano se ha convertido en una de las figuras más emblemáticas de la institución tuza, pues durante su estancia logró diez títulos, cuatro nacionales y seis internacionales.
Por ahora, el cafetero se alista para tomar las riendas de un nuevo puesto, director de porteros del club, no sin antes despedir el año de la mejor manera al lado de sus familiares.
"Me voy feliz pensando en lo que hice y no en lo que dejé de hacer; me voy feliz porque estoy sano; me voy feliz porque construí una gran familia. Gracias por todo, siempre lo dije y lo he dicho, la gratitud es la mejora del corazón; gracias a todos los que me han demostrado su cariño y aprecio, eso es lo más importante”, comentó Miguel.
Para el 2012, Calero se convertirá en director general de entrenadores de porteros de la institución, cargo en el que se encargará del entrenamiento de los tres guardametas en el primer equipo, y ayudará a la realización de un proyecto muy prometedor: la creación de una escuela de arqueros.
La Navidad y Año Nuevo son fechas en las que Miguel Calero goza de la familia y esta vez tendrá la visita de algunos familiares procedentes de Colombia, a quienes deleitará con una suculenta cena, en la cual destacan los tradicionales platillos mexicanos.
"Afortunadamente algunos de mis seres queridos pudieron venir, el tenerlos cerca y gozar de mucha salud son los mejores regalos para estas fiestas”, puntualizó el Condor, quien ya es todo un especialista en la cocina de nuestro país, luego de tantos años de radicar en estas tierras, en las que dejó huella.