El paro arbitral afecta a toda la industria del futbol y representa que se pospongan las ganancias que los clubes iban a tener en esta Fecha 10. Aunque más adelante se juegue la jornada que en esta ocasión quedó pendiente, esto no significa que deje de haber déficit para los equipos.
Javier Salinas, especialista en Administración Deportiva y exdirector de Mercadotecnia y Comercialización de la FMF, habló de una cifra aproximada de 55 de millones de pesos que dejan de percibir en estos momentos los clubes.
“Las ganancias que no se obtuvieron en esta fecha concretamente son para los clubes, los dueños, medios de comunicación, proveedores y personas que trabajan en los estadios que en promedio son mil 500.
“Para esta jornada son alrededor de 55 millones de pesos la cantidad que no percibirán, tampoco es más porque un primer paro no es problema para contratos o cancelación de compromisos ya establecidos. Se podrá recuperar gran parte cuando se juegue la jornada”, dijo.
Entre más rápido se solucio ne el problema, habrá menos afectaciones en la industria, y por ahora no puede hablarse de una cantidad mayor.
“Si esto se alarga sí puede complicar mucho. La primera jornada no hay tanta bronca, es imposible que haya tanta pérdida porque todo lo estimado es a base de entradas, de publicidad en medios de comunicación, el gasto que hace el aficionado promedio de asistencia y el que hacen los clubes para abrir sus estadios y en el otro caso para viajar los visitantes”, indicó.
Dentro de lo malo, también debe buscarse un efecto positivo. La afición extraña a sus equipos y un fin de semana futbolero, y la industria tiene que formar siempre buenas estrategias.
“Del drama o de la crisis sí se puede sacar un provecho. Si el futbol mexicano y la Federación hacen buenas estrategias, creo que pueden salir fortalecidos de esto; este paro independiente de la opinión que tengamos de los árbitros, puede servir para valorar nuestro futbol”, indicó.