Enrique Bonilla, presidente de la Liga MX, considera que la regla 10/8 beneficiará a las fuerzas básicas de los clubes, ya que motivará a los jóvenes para ganarse un puesto y aseveró que para el siguiente año futbolístico, 2017-18, la normativa se transformará en 9/9, dependiendo de los resultados que haya otorgado.
“En la Final, ¿cuántos no nacidos en México hubo en las dos alineaciones?”, cuestionó el directivo en charla con RÉCORD. “No es tanta la diferencia a lo que se está haciendo actualmente. Es mover el mercado y abrirle paso a los jóvenes.Si lo analizan fríamente y ven las alineaciones de esta emporada, van a ver que no es tan descabellado lo que se quiere hacer".
“Se gastan 400 millones de pesos en fuerzas básicas , ¿para luego taparlos? No suena muy lógico. Lo que se busca es darle espacio al joven. Ya está aprobado que para la campaña 2017-2018 serán 9-9 y se va a analizar con base en los resultados obtenidos; además, se va a seguir analizando con el paso de lo que ocurra en el futbol mexicano”, precisó.
De igual manera, el mandamás de la Liga confía en que la regla dé buenos resultados como la iniciativa 20/11, que fue criticada, pero terminó beneficiando a los clubes.
“Así como nos apedrearon el rancho porque metíamos a jóvenes a fuerza con lo del 20/11, porque pensaban que obligábamos a algo, pero que al final ya no hubo necesidad de pedir nada porque los clubes meten jóvenes por su propia mano, de la misma manera esperamos que ocurra con esta iniciativa del 10/8”, comentó el presidente de la Liga.
En otro sentido, Bonilla reveló que, durante el foro de Soccerex, les comentó a los directores de las principales Ligas del mundo sobre la iniciativa que buscan presentar ante FIFA, con la cual busca que se tome en cuenta a las justas nacionales en los calendarios internacionales, para evitar casos como la convocatoria de Carlos Sánchez a Uruguay en plena Final.
“Lo que queremos es tener presencia en FIFA para levantar la mano y decir que su calendario está muy bien, pero explicar cuándo para cada Liga y evitar que afecte a los equipos en convocatorias a selección nacional. Un ejemplo es el caso de Carlos Sánchez, que está en el reglamento y no puede hacer uno nada más que interceder a la buena voluntad de las Federaciones. Lo pudimos lograr con Ecuador y con Colombia, pero Uruguay nos dijo ‘lástima Margarito’, y no queda más que aceptar”, expresó.