Cuando parecía que los Tigres no iban a poder abrir el complicado cerrojo que el Houston Dynamo plantó en la cancha del Compass Stadium, Enner Valencia y Julián Quiñones aparecieron con sendos golazos para sellar una valiosa victoria por 2-0 a favor de su escuadra, lo cual los deja con una cómoda ventaja para la Vuelta de Cuartos de Final de la Concachampions.
El cuadro de Ricardo Ferretti intentó por todos lados desde el arranque del partido, pero la férrea defensa rival y los propios errores en la última zona, provocaron que los primeros 45 minutos terminaran con un tenso y apretado 0-0.
Mientras que el Orange Crush realmente no ponía en aprietos al guardameta Nahuel Guzmán, los felinos empujaban con todo al ataque y, al 53', Quiñones mandó un aviso de lo que vendría después con un potente zapatazo, pero la pelota se estrelló en la mano de un adversario y el silbante no marcó nada.
Así continuaron las acciones en territorio texano, aunque nada parecía definir a un ganador, más por la falla de ideas de Tigres, que por los aciertos del Dynamo; hasta que se juntaron Valencia y Luis Quiñones para armar una excelsa triangulación que desordenó toda la defensa del conjunto de la MLS.
Fue al 78' cuando, en una descolgada, Enner puso un gran pase al movimiento de Luis, quien sin pensarlo recentró la pelota al corazón del área, donde el ecuatoriano entraba solo para simplemente empujar la pelota y poner el 1-0 en el marcador.
Tres minutos después, el otro Quiñones, Julián, bajó un balón largo del propio Valencia en el borde del área, se hizo el espacio hacia un costado para quitarse la marca de DaMarcus Beasley y metió un potente zurdazo que venció al portero Joe Willis. 2-0 y a su casa.
No hubo tiempo para más, aunque no fue necesario para los Tigres, que lucieron dominantes y no deberían tener problemas para sellar todo en casa, con su gente, y frente a un equipo que no mostró armas para infundir miedo al conjunto de San Nicolás de los Garza.
