El sábado pasado un grupo de aficionados invadió el campo en el juego entre Chiapas y Santos, lo que obligó a que el juego se detuviera por varios minutos y este martes, Jaguares emitió un comunicado en el que señaló que hubo 26 detenidos, entre ellos 9 menores de edad.
"Se les acusó de alterar el orden público y agredir a seis elementos de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC) y de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM)", expresa en el documento el cuadro chiapaneco.
Además, Jaguares repudió la violencia que se presentó en su estadio y se comprometió a trabajar con la FMF, así como con el gobierno de la entidad para garantizar la seguridad.