Christian Bermúdez obtuvo resultados inmediatos luego de su experiencia de hipnosis con Luis Guillén, al conseguir el gol del empate por 1-1 en el enfrentamiento de Copa MX de este miércoles, entre Chiapas y Necaxa; sin embargo, el mentalista pide no endiosar ni satanizar la técnica, pues como todas, tiene sus limitantes.
El experto en la reprogramación mental contó a RÉCORD cómo fue su encuentro con el Hobbit y deja claro que el tanto del mediocampista no es magia echa por él.
"Creo que es tiempo de que la gente vea que esto puede cambiar su vida, puede hacerte sentir mejor, que dejemos de satanizar o endiosar la hipnosis; satanizarla en el sentido de que hay gente que piensa que son poderes, que nosotros ejercemos voluntad sobre la persona que tenemos, si hiciéramos eso, dominaríamos nosotros el mundo y no es así, es una técnica, una estrategia que tiene sus limitantes y hay que complementarla con algunas otras cosas, por eso mi trabajo es coaching mental", señaló Guillén.
El hipnotista explicó que lo que hizo con Bermúdez fue disipar los pensamientos negativos o dudas que existen en su mente para que ésta pudiera conectarse al cien por ciento con el talento adquirido gracias al entrenamiento de años.
"Es como una radio cuando se oye estática, la estática son todos estos pensamientos negativos, dudas... algunas conscientes y otras inconscientes, lo que hice en ese momento fue: vamos a poner una fuente directa a esta conexión y disipar el proceso de dudas, miedos y al final de cuentas lo que hizo Hobbit no fue lo que yo le dije, fue lo que él sabe, nada más eliminando ese 'ruido', porque mucha gente piensa: 'hipnotizas a alguien y ya hace lo que tú quieras' y no es así.
"Si él no tuviera entrenamiento de todos los años que lleva, pues eso que sucedió como mágico (el golazo de tiro libre en entrenamiento y el tanto en Copa), no sucede. La 'magia' sucede por el conjunto de trabajo en el proceso mental, que se ve muy espectacular, pero lo espectacular es el tiempo que el lleva entrenado y sólo fue detonar esa habilidad que él tiene, sin ruido, sin estática", remató Luis Guillén.
