Los refuerzos de cada temporada del Cruz Azul se convierten más en un problema de gastos, que en una solución que ayude para volver a una Liguilla. En total, suman 52.7 millones de dólares, según estima el portal especializado Transfertmarkt.
Desde hace cinco torneos, los mismos que tiene el equipo sin acceder a la Fase Final por el título, han llegado 32 jugadores procedentes de México y del extranjero, de los cuales sólo nueve fueron o son constantes.
Desde el Apertura 2014 a la actualidad, 10 refuerzos de los 32 sólo jugaron de cero a 92 minutos en Liga. Pablo Torres, Aníbal Zurdo, Carlos Lizarazo, Antonio Pedroza, Jerónimo Amione, Juan González, Silvio Borjas, y actualmente Jesús García y Érick Torres suman esta estadística.
Una de las principales dificultades para que los refuerzos funcionen han sido las lesiones. Carlos Lizarazo, Roque Santa Cruz, Marc Crosas, Víctor Vázquez y Jorge Benítez resaltan en este rubro.
Asimismo, llegar tarde, es decir, con la temporada ya en curso, va en detrimento del equipo que tiene que esperar la adaptación del jugador. A falta de lo que ocurra con el ‘Cubo’ Torres, quien se integró a mitad de este torneo, varios tuvieron un paso efímero en La Máquina, como Fernando Belluschi, Antonio Pedroza y Federico Carrizo.
Pero no sólo en el campo se han visto cambios constantes, ya que también a nivel directivo ha habido rotaciones en este lapso. Agustín Manzo y Eduardo de la Torre son los últimos directores deportivos, mientras que Luis Fernando Tena, Sergio Bueno y Tomás Boy han desfilado como técnicos, sin contar interinatos.
De los 32 refuerzos desde hace dos años y medio, el Maza Rodríguez volvió a la titularidad. Aldo Leao también ha sido constante. Mientras que de los elementos que se integraron para el Apertura 2016, Adrián Aldrete, Enzo Roco, Julián Velázquez y Francisco Silva tienen un puesto en el campo.