Fernando Hernández Gómez fue el árbitro del partido entre Cruz Azul y Monterrey, mismo en el que el silbante dio de qué hablar por las polémicas decisiones que tomó.
Corrían 23 minutos del encuentro cuando el árbitro no señaló un penalti en favor de La Máquina, por lo que los jugadores azules comenzaron a reclamarle al colegiado el porqué no lo marcó la pena máxima, ya que argumentaban que un elemento de Rayados había metido la mano para evitar que el balón pasara a la portería.
Por otra parte, Martín Cauteruccio tuvo su debut en la Liga MX y consiguió un gol que le fue anulado por fuera de lugar. El elemento de La Máquina no dudó el mandar a guardar el balón cuando se le presentó la oportunidad; sin embargo, el árbitro se quivocó al anularlo ya que el uruguayo estaba en buena posición.