Durante su presentación como nuevo refuerzo de Chivas, Oribe Peralta reveló que su familia recibió amenazas de secuestro mientras estaba en América, y que éste fue uno de los factores para que se diera su llegada al Rebaño.
"Una situación personal que también me hizo moverme, fue muy fuerte pero creo a muchas personas les pasa esto, fue una amenaza fuerte de secuestro hacia mi esposa y hacia mis hijos. Fue una de las causas que influyó que yo estuviera acá, pero no fue el 100 por ciento", explicó.
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Peralta reiteró que su edad no hace que ya piense en el final de su carrera y garantizó que dará lo mejor en Chivas.
"No pienso en el retiro, apenas voy comenzando. Aquí espero dar el máximo. A mí no me asusta el descenso, con buenos resultados puedes pensar en objetivos y títulos", agregó.