Dos exjugadores de los clubes PSV y Vitesse denunciaron haber sufrido abusos sexuales por parte de miembros del personal cuando eran menores de edad, hechos que ocurrieron en los años 60 y 90, respectivamente, según reveló el diario neerlandés "De Volkskrant".
Se trata de los dos primeros casos conocidos en el futbol en Holanda después del escándalo por pederastia que sacudió al balompié inglés a finales de 2016, después de que Andy Woodward, exfutbolista del Sheffield Wednesday, revelara que había sufrido abusos sexuales por parte de un antiguo técnico desencadenando cientos de denuncias similares.
El primero de ellos concierne al club PSV y se produjo en los años 60, cuando el denunciante que desea preservar el anonimato, que entonces tenía ocho años, habría empezado a ser objeto de abusos por parte de uno de los responsables educativos del equipo. Según su testimonio, los abusos se producían con frecuencia después de los entrenamientos en un bosque cercano a las instalaciones del club juvenil.
Por otra parte, el caso relativo al Vitesse se produjo en 1996 (Renald Majoor), cuando un jugador de 12 años sufrió abusos sexuales por parte del líder de su equipo, quien lo retuvo con él durante una noche, según relató al diario holandés. En esta ocasión la dirección del club tuvo conocimiento de los hechos y despidió al responsable, que fue también condenado a seis semanas de prisión, pero el equipo no hizo público el incidente.
El director del PSV, Toon Gerbrands, y el del Vitesse, Joost De Wit, se han disculpado con las víctimas y han instado a los exjugadores de sus clubes a informar sobre casos similares. Esperan que la experiencia de las víctimas contribuya a atajar estas situaciones en el presente.
"Ha pasado un sufrimiento indescriptible. Respetamos enormemente que haya dado el paso de contarnos su historia. Es ingenuo asumir que estas cosas ya no ocurren. En el PSV hemos creado una situación en la organización que debería ayudar a evitar estos crímenes", dijo Gerbrands a "De Volkskrant".